Una dura etapa enfrentará el comercio fronterizo a partir de ahora por la falta de feriados en el calendario brasileño. La preocupación se acrecienta porque en los últimos tiempos solo los asuetos en el vecino país atrajeron buena cantidad de visitantes en esta ciudad.
El próximo 1 de mayo, Día de los Trabajadores, es el último feriado importante dentro del calendario brasileño y se aguarda una importante cantidad de compristas. Sin embargo, por caer un domingo, día normal de descanso, el incremento de visitantes no sería muy elevado.
Luego todo el resto de los meses de mayo, junio, julio y agosto los comerciantes deberán soportar la peor etapa de la crisis comercial del año, según el análisis de la Cámara de Comercio local.
Los dirigentes del sector señalaron que la crisis del vecino país ya redujo a su mínima expresión la actividad en esta ciudad, por la devaluación continua del real ante dólar. A ello se agregan la inflación interna y la caída del poder adquisitivo de los brasileños en los últimos tres años.
“Algunos comercios posiblemente reducirán aún más su fuerza laboral, pero los grandes comercios necesitan de una mínima cantidad para mantenerse en funcionamiento, como los shopping y las galerías comerciales”, señaló el presidente de la Cámara de Comercio, Héctor Fernández.
El último día de gran movimiento en la localidad fue el día de Tiradentes en el Brasil, que se recordó el pasado 21 de abril. La cantidad de compristas fue muy importante y generó cierto respiro en algunas tiendas y comercios.
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